Utiliza el tejido y otras técnicas artesanales tradicionales para transmitir al espectador una observación meditativa y poderosa sobre todo aquello que le rodea. Inicialmente su trabajo tenía que ver con la conciencia del cuerpo humano, representándolo como una estructura seccionada, recompuesta y decorada mediante la costura y el bordado para reflexionar sobre su relación con los demás.
Posteriormente esa mirada se desplaza hacia su entorno, para concentrarse en los vínculos que la unen con los otros y su obra inflexiona para adquirir un carácter más social, abriéndose a reflexionar sobre la transformación de la naturaleza y la relación o contacto de los humanos con ella, para lo que utiliza el bordado y el tejido para hacer un paralelo entre el trabajo manual y los procesos de la naturaleza, creando estructuras con el hilo similares a las que hace una planta, por ejemplo. En algunas obras se simulan experimentos que buscan recomponer la naturaleza con otro orden, enseñándonos a mirarla nuevamente.
Su trabajo actual busca reaprender de la labor de los artesanos para restablecer el contacto con los procesos manuales y corporales con que la herencia, la cultura y las imágenes han ido tomando forma y mostrar las huellas dejadas por el cuerpo y la naturaleza en ellos.
“Me aproximo al mundo vegetal y al paisaje a través del laborioso y minucioso trabajo del bordado y el tejido. Trato de acercarme a sus ritmos y su constante transformación, y así forzarnos a tomar una mirada contemplativa sobre nuestro entorno. La imagen es tejida a partir de mapas geológicos, climáticos e hidrológicos de las zonas donde la fotografía fue tomada. Los hilos que componen la imagen están hechos de fibras animales y vegetales y teñidos con tintes naturales por comunidades cercanas al paisaje que vemos en la foto.” (ATB) Licenciada en la Facultad de Arte, ha participado en exposiciones individuales y colectivas en Sudamérica, Norteamérica y Europa y ha ampliado estudios y realizado residencias en París, Taipei, Ginebra y Lima.